El primer pronóstico falló. El domingo amaneció con 13 grados, viento fresco y unas nubes que antes de las 8 de la mañana provocaron una leve llovizna en Santiago de Chile , justo cuando miles de personas ya se preparaban para ir a votar. Poco después, el cielo ya estaba despejado y se espera que más tarde sí las temperaturas superen los 25 grados, como adelantan los meteorólogos, que piden a los votantes que lleven ropa liviana y agua fresca.

Después del anochecer se sabrá si los pronósticos políticos sí acertaron. Aquí, en un clima por ahora tranquilo y con mucho movimiento frente a los centros de votación, los chilenos esperan con incertidumbre los resultados de esta elección presidencial y parlamentaria que podría marcar un giro hacia la derecha luego de los cuatro años de gobiern

See Full Page