Por SOPHIA TAREEN, BRIAN WITTE y MARYCLAIRE DALE

El gobernador de Carolina del Norte denunció que las redadas migratorias en Charlotte, en vez de inspirar seguridad, están “fomentando el miedo”.

La administración Trump ha convertido a la ciudad de aproximadamente 950.000 habitantes en el último objetivo de su ofensiva que, según dice, combatirá el crimen, a pesar de que la delincuencia está en baja y los líderes locales se oponen enfáticamente a la medida. Los residentes de Charlotte reportaron la presencia de agentes federales incluso cerca de iglesias, complejos de apartamentos y tiendas.

“Hemos visto agentes enmascarados, fuertemente armados, con vestimenta paramilitar conduciendo autos sin identificación, apuntando a ciudadanos estadounidenses basándose en el color de su piel, perfi

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