En la madrugada del 18 de noviembre, cinco buses de la empresa Pegasso Express fueron consumidos por un incendio en su cochera, ubicada en el distrito de Puente Piedra, específicamente en el A.H. Jesús Oropesa Chonta. El fuego se propagó rápidamente, generando una densa columna de humo que alertó a los vecinos, quienes llamaron a los bomberos antes de que las llamas alcanzaran inmuebles cercanos.

Las unidades afectadas pertenecían a la línea “P”, que cubre la ruta 1308, conectando Puente Piedra con San Juan de Lurigancho, uno de los corredores más transitados de Lima. Este servicio, relativamente nuevo, había comenzado a operar en 2024 y había ganado aceptación entre los usuarios por su recorrido directo.

El comandante Simar Caballero, jefe de la segunda brigada de los Bomberos de Lima Norte, informó que se trató de un incendio de Código dos. “Son un total de cinco buses totalmente prendidos y un bus que salió a la parte posterior. Los motivos de cómo sucedió no lo sabemos. Ya de eso se encarga la parte de Investigación de la Policía”, declaró Caballero.

A pesar de la magnitud del incendio, no se reportaron heridos. Sin embargo, la Policía Nacional y el Ministerio Público han iniciado las diligencias para determinar las causas del siniestro, y se sospecha que podría haber sido provocado por una banda delincuencial, dada la naturaleza del incidente.

Los buses de la Línea P cubren una ruta que conecta diversos puntos de Lima Norte y el este de la capital, incluyendo paraderos clave como Av. Pachacútec, Av. Fernando Wiesse, y Jirón Galilea, entre otros. La situación ha generado preocupación entre los vecinos y usuarios del servicio, quienes esperan respuestas sobre la seguridad de los transportes en la zona.