«Alquilo una habitación de mi casa por horas para poder sobrevivir». Este es el testimonio de un palmesano que lleva unos cinco años realizando esta práctica, cada vez más extendida en Mallorca. Por temor a ser sancionado, este propietario no quiere desvelar su identidad.

«El sistema me ha obligado a alquilar una habitación de mi casa por horas; tengo más de 50 años y, por mucho que digan, es imposible encontrar un trabajo a determinada edad; nadie me contrata. O hago esto o me quedo en la calle», expresa.

Este propietario obtiene unos 1.000 euros al mes arrendando un cuarto de su casa. En concreto, el precio de una hora es de 25 euros; el de dos horas asciende a 45 euros; el de tres es de 55 euros; y el de cuatro horas, de 65 euros. Cabe precisar que los sábados, domingos y festivos com

See Full Page