La semana pasada, el presidente Trump le respondió bruscamente a una periodista cuando esta le preguntó sobre Jeffrey Epstein. «¡Silencio!», le espetó el presidente a Catherine Lucey, reportera de Bloomberg News. «¡Silencio, cerdita!».

El uso que hizo el Sr. Trump de un insulto infantil causó indignación. «Repugnante y completamente inaceptable», criticó Jake Tapper, de CNN. Un grupo de defensa de la prensa afirmó que «no se debe tolerar que se ataque a las periodistas con insultos humillantes».

El jueves, la secretaria de prensa del Sr. Trump, Karoline Leavitt, dio un giro diferente a la declaración.

“Creo que todos los presentes en esta sala deberían apreciar la franqueza y la apertura que reciben del presidente Trump casi a diario”, dijo la Sra. Leavitt a los periodistas durante una

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