Un tiroteo ocurrido este miércoles en Washington D.C. ha dejado a dos agentes de la Guardia Nacional de Virginia Occidental en estado crítico. El ataque se produjo en la intersección de la calle 17 y la calle I, a pocos metros de la Casa Blanca. Las autoridades han confirmado que ambos agentes fueron alcanzados por disparos y posteriormente trasladados a hospitales, donde se encuentran en condiciones graves. El gobernador de Virginia Occidental, Patrick Morrisey, lamentó la muerte de los agentes, aunque más tarde se corrigió al indicar que había informes contradictorios sobre su estado. "Es con gran pesar que confirmo que los dos miembros de la Guardia Nacional han muerto a causa de las heridas", había afirmado inicialmente. El FBI ha identificado al sospechoso del ataque como Rahmanullah Lakanwal, un ciudadano afgano de 29 años. Este individuo fue capturado en el lugar de los hechos y también se encuentra en estado crítico. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, destacó la colaboración entre las autoridades locales y federales en la investigación. Testigos del tiroteo describieron momentos de caos y pánico. "Escuchamos disparos. Estábamos esperando en el semáforo en rojo y hubo varios disparos", relató una testigo. Las fuerzas del orden respondieron rápidamente, acordonando la zona y pidiendo a los transeúntes que se refugiaran en edificios cercanos. El presidente Donald Trump condenó el ataque, calificando al agresor de "animal" y asegurando que enfrentará graves consecuencias. "Que Dios bendiga a nuestra Gran Guardia Nacional y a todas nuestras Fuerzas Armadas", expresó en un mensaje. Las investigaciones continúan mientras la escena del crimen permanece bajo vigilancia. Este trágico incidente ha puesto de relieve la vulnerabilidad de la seguridad en una de las áreas más protegidas de Estados Unidos, generando preocupación en la Casa Blanca y entre las autoridades federales. El Pentágono ha anunciado el despliegue de 500 militares adicionales a Washington como parte de las medidas de seguridad tras el ataque. Las autoridades siguen recopilando información y actualizando el estado de los heridos, mientras la comunidad se une en oración por su recuperación.