La condena impuesta a Martín Vizcarra generó un impacto profundo en el panorama político y social del Perú, afectando tanto a sus partidarios como a sus detractores. El fallo judicial que lo sentenció a catorce años de prisión por acusaciones de corrupción durante su gestión como gobernador de Moquegua se posicionó como un acontecimiento central en el debate nacional, suscitando diversas reacciones en su círculo más cercano y en el ámbito político.

Mario Vizcarra, hermano del exmandatario, emergió como una de las voces más visibles tras conocerse la sentencia. Desde una camioneta en las afueras del tribunal, se dirigió a los medios de comunicación y a los simpatizantes de Martín Vizcarra con un mensaje breve pero contundente: “Hoy es un día negro, es un día de vergüenza”.

Mario Vizcarra

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