El GP de Qatar transformó por completo el desenlace del Mundial 2025 y dejó la definición abierta para Abu Dhabi. McLaren, que había sido el equipo más fuerte del fin de semana y dominado la temporada, cometió un error estratégico inexplicable durante el safety car: no detener a Piastri ni a Norris cuando todos los demás lo hicieron. Ese fallo alteró por completo la carrera y entregó a Verstappen una oportunidad que no estaba en los planes.

Piastri, dueño de la pole del sprint y de la carrera, y Norris, obligado a remontar tras una mala largada y un nuevo despiste, quedaron expuestos frente a un Verstappen que sacó máximo provecho de una estrategia ajena. Aunque el Red Bull fue inferior a los McLaren, la impecable ejecución del neerlandés y los errores del equipo papaya inclinaron la bala

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