Autoridades de San Pedro Garza García, Nuevo León, desmantelaron una fiesta clandestina en la que se encontraban entre 350 y 400 menores de edad. La intervención se originó la noche del 28 de noviembre tras un reporte por ruido excesivo en el Fraccionamiento San Patricio. En un primer recorrido, oficiales no encontraron el lugar señalado, pero horas después, el caso tomó relevancia cuando un padre denunció que su hija estaba incomunicada dentro de una propiedad de la misma zona.

Al regresar al fraccionamiento, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública municipal localizaron un inmueble aparentemente abandonado, que era utilizado para organizar fiestas clandestinas mediante invitaciones compartidas vía WhatsApp. El secretario de Seguridad, José Luis Kuri, informó que los adolescentes

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