A partir de diciembre de 2025, los mexicanos comenzarán a recibir en su cambio una nueva versión de la moneda de 1 peso, como parte del programa de modernización de la Casa de Moneda y el Banco de México (Banxico).

La gran sorpresa es que la moneda no cambia por fuera, sino por dentro: mantendrá el mismo diseño, tamaño, peso, diámetro y cuño, pero tendrá una nueva composición metálica, más económica y con menor impacto ambiental.

Banxico confirmó que este ajuste permitirá producir monedas más sustentables sin generar complicaciones en su uso cotidiano en máquinas expendedoras, parquímetros, transporte público o bancos.

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¿Qué cambia exactamente de la

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