La selección argentina femenina aplastó este martes a Bolivia por 8-0 en el estadio Florencio Sola y consolidó su condición de escolta del líder Venezuela en la Liga de Naciones de Conmebol. Pero más allá de la goleada, la noche en Banfield tuvo acento cordobés: Florencia Bonsegundo y Paulina Gramaglia fueron figuras excluyentes, protagonistas de una actuación que marcó el ritmo del equipo de Germán Portanova.

La apertura del marcador llegó temprano, a los 7 minutos, con un cabezazo impecable de Gramaglia tras un centro quirúrgico de Maricel Pereyra. La delantera nacida ex-Talleres no sólo abrió el partido sino que más tarde firmó un doblete. Su segundo gol, ya en el complemento, llegó tras una asistencia de Francisca Altgelt y una definición en dos tiempos que estampó el 4-0 parcial.

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