Siempre resulta agradable toparse con el delicado aleteo de las mariposas en medio del campo o, incluso, en cualquier espacio verde de nuestras ciudades. Estos insectos lepidópteros, además de destacar por sus bellos y armoniosos colores, poseen otras muchas cualidades que resultan sorprendentes para unas criaturas de apariencia tan frágil.

Este es el caso de la mariposa monarca, que realiza cada año una travesía de miles de kilómetros dentro de América. Una hazaña que no sería posible si la especie no dispusiera de un complejo sistema de navegación que combina la orientación por la luz solar, la percepción del campo magnético terrestre y la capacidad de cambiar de rumbo según las condiciones ambientales.

Más allá de este viaje extraordinario, la monarca es fundamental para la biodiversidad de América por muchos motivos: su mayor o menor presencia refleja de forma muy sensible el estado de los ecosistemas que atraviesa y en los que contribuye a la reproducción de numerosas plantas y cultivos mediante su labor polinizadora.

Menos mariposas

Por todos estos motivos resulta tan alarmante el declive que están experimentando tanto la monarca como el resto de las especies de mariposas. Un reciente estudio publicado en la revista Science alerta de que, entre los años 2000 y 2020, esta caída ha sido del 22% en las 554 especies registradas.

«Las disminuciones de especie de mariposas fueron generalizadas, con 13 veces más especies en disminución que en aumento. La prevalencia de las disminuciones en todas las regiones de Estados Unidos resalta la urgente necesidad de proteger a las mariposas de mayores pérdidas», insisten los autores en el paper .

Los investigadores señalan que la exposición a pesticidas, la pérdida de hábitat, los cambios en el uso del suelo y los efectos del cambio climático son los factores que más están contribuyendo a esta preocupante disminución de las poblaciones de mariposas.

mariposas monarca

Aplicación para móviles

En este contexto de retroceso generalizado, cualquier herramienta que permita conocer mejor a las mariposas y mejorar su protección resulta especialmente valiosa. Y eso es precisamente lo que persigue Project Monarch Science, una nueva aplicación para móviles , desarrollada por la compañía Cellular Tracking Technologies, que está revolucionando el estudio de la migración de la monarca.

A través de BlūMorpho, un sistema de pequeñas radios solares ultraligeras que se adhieren al cuerpo de los insectos para su rastreo —diseñadas para no interferir en el vuelo—, los investigadores y los amantes de la naturaleza pueden seguir los movimientos de ejemplares individuales durante su viaje de miles de kilómetros desde Canadá y Estados Unidos hasta sus colonias de hibernación en el centro de México.

Radio solar

Este logro se debe a una minúscula etiqueta adherida a la mariposa, que emite una señal de radio, con un peso de tan solo 60 miligramos , que funciona con energía solar y tiene un precio de 200 dólares.

Durante este año, los científicos han equipado con estas etiquetas a más de 400 ejemplares de monarca, y ahora pueden seguir sus rutas migratorias a través de una aplicación móvil desarrollada por Cellular Tracking Technologies , la compañía de Nueva Jersey responsable de fabricar estos dispositivos.

El peso habitual de las mariposas monarca oscila entre los 500 y 600 miligramos , lo que significa que cada ejemplar marcado que completa la migración transcontinental transporta un peso comparable al de media pasa que incluye tres granos de arroz sin cocer.

Aplicación mariposas monarca

Datos valiosos

Esta red colaborativa está permitiendo generar datos cada vez más valiosos sobre la migración de la monarca. Gracias a las detecciones acumuladas, los investigadores pueden identificar con mayor claridad las zonas donde las mariposas se concentran, formando las mayores colonias, o bien los momentos y lugares en los que cambian de rumbo.

Otro factor clave ha sido el rediseño de las etiquetas realizado a principios de este año por Cellular Tracking Technologies, y que permite a cualquier dispositivo Bluetooth detectar automáticamente su señal cuando una mariposa pasa a menos de 90 metros.

Esta proeza de ingeniería ha multiplicado el flujo de datos disponibles, ya que transforma todos los móviles que cuentan con la app instalada en nodos de seguimiento capaces de captar el paso de estos insectos sin necesidad de equipos especializados. El resultado es un mapa mucho más denso y preciso de sus movimientos reales a lo largo del continente.

mariposas monarca

Aficionados y criadores

Igualmente relevante ha sido el hecho de que esta tecnología de rastreo pensada para biólogos se haya extendido también a aficionados y criadores de monarcas.

Por tan sólo 200 dólares, y el permiso preceptivo —que sólo es obligatorio en algunos Estados norteamericanos— se puede adquirir una de estas etiquetas para ser colocada en otra monarca más y así aumentar el número de ejemplares rastreados.

La apertura al público multiplica el potencial de la red, ya que cada etiqueta adicional incrementa las posibilidades de detección y, por tanto, la calidad de los datos científicos. La colaboración entre expertos y ciudadanos está convirtiendo a la mariposa monarca en una de las especies mejor monitorizadas.

Conocimiento científico

Según los desarrolladores de la app, el objetivo es doble: mejorar el conocimiento científico sobre una de las migraciones más extraordinarias del planeta y, al mismo tiempo, implicar al público en su seguimiento y conservación.

La herramienta ya está disponible para su descarga y forma parte de un proyecto más amplio que reúne a universidades, organizaciones de conservación y especialistas en seguimiento de fauna.

mariposas monarca

Ventana inédita

La puesta en marcha de esta aplicación no sólo abre una ventana inédita a los viajes de las mariposas monarca , sino que también recuerda hasta qué punto seguimos desconociendo buena parte de la vida de estos insectos.

Cada ruta registrada y cada señal captada por un móvil sirven de recordatorio de que la naturaleza todavía nos puede seguir sorprendiendo. Y, al mismo tiempo, es una llamada a la acción conjunta de científicos y de ciudadanos con sensibilidad ecologista con el objetivo de conocer mejor a una especie clave que merece la pena proteger.