Diego Tapia Santivañez tenía apenas 17 años cuando decidió desmarcarse del guion habitual. Estudiaba Administración en la Pacífico, probó un ciclo de Marketing y sintió que estaba imitando una vida que no le pertenecía. “Siempre me gustó cine y televisión”, recuerda. Mientras algunos compañeros hacían maletas para estudiar fuera, él imaginó que también podía hacerlo… pero siguiendo el camino que realmente deseaba. Sus padres le dieron luz verde y en 2017 aterrizó en Los Ángeles para estudiar Cine y Televisión en Cal State Northridge.

Tenía muy en claro que en el extranjero era trabajar o volver. “Sabía que si no encontraba trabajo rápido me regresaba”, dice. Eso lo empujó a voluntariados, sets improvisados y prácticas que abrían puertas. Uno de esos días frenéticos lo llevó a Propagate Co

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