Desde la inhóspita altitud de la cárcel de máxima seguridad de Challapalca, Joran van der Sloot enfrenta su encierro por asesinato. En un breve registro difundido por Panorama, el interno aseguró dedicar sus días al ejercicio y a la lectura de la Biblia, e incluso recitó pasajes religiosos ante la prensa. Sin embargo, la imagen de arrepentimiento llega después de casi dos décadas marcadas por contradicciones, engaños a las familias de sus víctimas y un historial penal que lo sitúa entre los reclusos más vigilados del país.
Por primera vez ante cámaras, dirigió una intención de pedir perdón a los padres de Stephany Flores , joven que ultimó en un hotel de Miraflores. “En diecisiete años nunca tuve la oportunidad de pedir perdón por lo que hice. Si algún día puedo conversar y explic

La República

Infobae Perú
Noticias de Perú
Trome Policiales
El Popular PE Espectáculos
Diario Viral
Diario Uno en Peru Política
Andina
Andina Locales
Panamericana TV
AlterNet