La Unesco adoptó el primer marco normativo mundial sobre la ética de la neurotecnología que busca establecer salvaguardas esenciales para asegurar que esta tecnología contribuya a mejorar la vida de quienes más la necesitan sin poner en riesgo los derechos humanos y, según la directora general de la Organización, consagrar la inviolabilidad de la mente humana. Dafna Feinholz, directora interina de la División de Investigación, Ética e Inclusión de la Unesco, habló del tema en Aristegui.

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