La líder opositora venezolana, María Corina Machado, no estará hoy en Oslo para recoger el premio de la Paz de este año, según ha confirmado a la televisión pública noruega NRK el director del Instituto Nobel, Kristian Berg Harpviken. Corina Machado había confirmado su intención de ir a Oslo para recoger el galardón, pero este martes se tuvo que suspender su rueda de prensa previa al evento porque no estaba en la ciudad.

Corina Machado se convirtió en rostro conocido internacional en el periodo previo y posterior a las elecciones presidenciales de Venezuela del 28 de julio de 2024. La opositora había sido inhabilitada por el Tribunal Supremo y Edmundo González se presentó con su apoyo. El recuento oficial dio la victoria a Nicolás Maduro, pero las denuncias de fraude fueron generalizadas, incluso por parte de los observadores del Centro Carter, invitados al país por parte de las autoridades venezolanas.

Desde entonces, ha solicitado una  insurrección entre las fuerzas armadas y policía  para acabar con Maduro y se ha mostrado favorable a una  intervención internacional en su país , aunque no una invasión. Hace unas semanas, la opositora también celebró el despliegue militar de Trump en aguas del Caribe frente a las costas de Venezuela y a raíz del cual EEUU ha atacado varias embarcaciones a las que acusa de estar relacionadas con el narcotráfico, en acciones que muchos expertos consideran que contravienen el derecho internacional.

Días antes de ganar el premio, Corina Machado participó en la cumbre ultra Europa Viva del grupo de extrema derecha europeo Patriots. En su discurso, condenó la “crisis de identidad” de Occidente por la que los ciudadanos han dado la espalda a “los valores que dan sentido a nuestros futuro”. “Lo que empezó como una revolución socialista terminó desembocando en su consecuencia inherente: una trama criminal en la que el odio a nuestros valores occidentales se despliega a través de la mentira”.

El Comité Noruego del Nobel ha calificado a la referente de la derecha venezolana como “una valiente y comprometida defensora de la paz”, una mujer “que mantiene viva la llama de la democracia en medio de una oscuridad cada vez mayor”. Según ha explicado Jorgen Watne Frydnes, presidente del comité, el premio ha recaído en ella “por su incansable labor en la promoción de los derechos democráticos del pueblo venezolano y por su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”.