Dos años después de que el incinerador de residuos más grande de Miami-Dade se incendiara, los comisionados del condado acordaron iniciar nuevamente en camino para construir uno nuevo.
La pregunta más grande y controvertida, sin embargo, sigue en el aire: ¿dónde colocarlo?
Ante una inminente escasez de vertederos que ya obliga al condado a tomar la costosa medida de transportar algunos desechos al norte del estado, los comisionados de Miami-Dade acordaron el miércoles construir un nuevo incinerador con un diseño más limpio y moderno que también convertiría los desechos en energía.
“Tenemos que dejar de jugar a la política. Esta es la situación más importante que enfrenta este condado hoy”, dijo el presidente Anthony Rodríguez. “¿Adónde irá la basura?”.
Pero una serie de votaciones pare