En un provocador discurso de cuatro horas y 11 minutos, interrumpido por momentos con gritos de “¡traidora!”, “¡ corrupta !” y “¡ asesina !”, la presidenta Dina Boluarte dirigió ayer su último mensaje a la nación en el Congreso con la mención de supuestos logros y un llamado a la reforma del sistema de justicia que cuando acabe su mandato la procesará.

No hubo nada de autocrítica por parte de Dina Boluarte y más bien se presentó envalentonada, y desafiante.

Eso a pesar de que apenas el 2.1 % de peruanos apoyan a Boluarte y 97 % desaprueba su gestión, según último sondeo de la encuestadora CPI.

En el Hemiciclo del Congreso , a donde ingresó entre aplausos de congresistas de Fuerza Popular y APP, inició su discurso con la defensa de cómo respondió a las protestas en 20

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