El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha anunciado su intención de llevar a cabo una "ocupación total de la Franja de Gaza", incluyendo áreas donde se encuentran rehenes. Esta declaración se produce en un contexto de creciente presión sobre su gobierno. Para abordar esta situación, Netanyahu ha convocado una reunión del gabinete de seguridad para hoy, donde se discutirá la continuación y expansión de los combates en Gaza.

Un alto funcionario del gobierno israelí ha confirmado que el primer ministro buscará un debate sobre la seguridad en relación con la ofensiva militar. En este contexto, se ha expresado preocupación por las maniobras en zonas donde hay rehenes, ya que las fuerzas de seguridad temen que estas acciones puedan poner en peligro a los cautivos. Un comunicado oficial señala que "las fuerzas de seguridad se oponen a las maniobras en lugares donde se encuentran retenidos, por temor a causarles daño".

Además, el COGAT, el organismo militar israelí encargado de los asuntos civiles en los territorios ocupados, ha informado que permitirá a comerciantes locales de Gaza introducir mercancía en el enclave. Esta decisión busca "aumentar el volumen de ayuda" que llega a la región. Según el COGAT, un número limitado de mercaderes ha recibido la aprobación del estamento de defensa, bajo criterios específicos y un exhaustivo control de seguridad. Esta es la primera vez que se permite a los comerciantes gazatíes introducir bienes desde que el Ejército israelí rompió el alto el fuego el pasado 18 de marzo.