La Justicia de Mendoza concedió la prisión domiciliaria a Julieta Silva, la mujer que fue condenada por atropellar y matar a su novio, el rugbier Genaro Fortunato, en la ciudad de San Rafael, deberá cumplir prisión preventiva domiciliaria, con tobillera electrónica, por incumplir la restricción perimetral impuesta en el caso que la investiga por las lesiones agravadas en perjuicio de su marido.
El Ministerio Público Fiscal solicitó que la imputada sea encarcelada por el delito de privación ilegítima de la libertad agravada por el vínculo en varios hechos independientes en concurso real y lesiones agravadas por el vínculo, amenazas y desobediencia.
El fiscal Fabricio Sidoti presentó el planteo al considerar que existe riesgo de fuga y que Silva podría ejercer una influencia sobre el testi