Existe preocupación entre los agricultores de regadío por la rentabilidad de la cosecha. De momento, el precio de la patata es bajo y hay poca demanda, lo que retrasa su recogida. La remolacha ha pasado a ser un cultivo de escasa relevancia en la provincia de Salamanca y la esperanza está ahora mismo puesta en el maíz, en una campaña con múltiples dudas por las condiciones de siembra. No hay apenas más alternativas de cultivo en regadío, aunque se buscan.
Agricultores como José Antonio Alonso, apuestan, por ejemplo, por la cebolla pero su camino de momento no lo recorren otros porque, aunque ha crecido el cultivo, son 146 las hectáreas que se han sembrado este año en toda la provincia. Este productor de Encinas de Arriba tiene claro que hay alternativas al maíz «pero lo que pasa es que so