Con la evolución de las sociedades, las personas están cada vez más preocupadas por su calidad de vida más que simplemente acumular cosas para cubrir sus necesidades básicas. Si bien el dinero es esencial para cualquiera de las dos opciones la diferencia radica en la forma en la que se usa para conseguir un objetivo.
De hecho, la diferencia es tan profunda que, cuando la gente no tiene suficiente educación financiera o emocional , una persona que gana mucho dinero puede no tener calidad en su vida y experimentar frustraciones o incluso carencias, mientras que una persona con mayor preparación, aun cuando no tenga tanto dinero, puede conseguir metas a lo largo de su vida y, eventualmente, construir su felicidad.
De acuerdo con un estudio realizado por Daniel Kahneman, Premio Nob