Tras casi dos años de guerra entre Israel y Hamás, Gaza está en ruinas, y más de 60,000 personas han muerto, y 18,000 de ellas con niños, según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, (UNICEF), por lo que varios expertos denunciaron que la hambruna ha colocado a los menores en una desnutrición severa que pone en riesgo su salud y sus vidas.
Por esto, la UNICEF pidió la semana pasada que se incremente el tráfico humanitario y comercial hacia Gaza para combatir el aumento vertiginoso de las tasas de mortalidad que acompañan a los bloqueos de la ayuda, la guerra y el hambre.
Durante la videoconferencia “Alimentar a los niños de Gaza: cuando el hambre es un imperativo moral”, organizado por American Community Media , un experto en hambruna, un periodista y un investigador de Amni