Por Cesar Ortiz Anderson El 7 de agosto de 2025, desde Leticia, el presidente colombiano Gustavo Petro declaró públicamente que “Colombia no reconoce la soberanía del Perú sobre la isla de Santa Rosa”, una porción territorial surgida en el río Amazonas tras cambios geográficos recientes. La respuesta del gobierno peruano fue inmediata y enérgica: la presidenta Dina Boluarte rechazó la controversia, afirmó que no existe ningún tema limítrofe pendiente y respaldó la soberanía peruana sobre la isla, además de anunciar mejoras sociales para la población local. Expertos como María Alejandra Trujillo señalaron que esta disputa actúa como una “cortina de humo” para desviar la atención de los problemas internos de Colombia —como la inseguridad, la presencia de disidencias de las FARC y las crisis
La disputa por la isla Santa Rosa: una jugada política de Petro

2