Mientras saborea la paliza que le propinó al Gobierno el miércoles pasado en el recinto de la Cámara de Diputados con una docena de triunfos encadenados en serie, la oposición terminará de delinear esta semana el contorno de la próxima sesión, con la que buscará extender su buena racha en medio de la coyuntura electoral.
Con las listas nacionales para las elecciones intermedias del 26 de octubre ya cerradas, el conglomerado opositor buscará pasar la ambulancia entre los aliados al Gobierno para recoger a los heridos y de esa manera engrosar las mayorías necesarias para combatir los vetos presidenciales.
No será fácil: el Gobierno ya demostró habilidades ocultas para esquilmar las cuentas opositoras y frustrar sus objetivos, como cuando el año pasado blindó los vetos a las leyes de financ