Por SYLVIE CORBET
PARÍS (AP) — Nadar en el Sena es una atracción turística cada vez más popular en la capital francesa y una actividad imprescindible para los propios parisinos. Miles de personas han disfrutado de un chapuzón en el río desde que se abrieron tres sitios de baño públicos el mes pasado, los primeros en más de un siglo.
Se espera que las zonas de baño se llenen aún más con la llegada de una ola de calor a la región el martes. El servicio meteorológico francés, Meteo France, puso a París en “alerta máxima” por temperaturas que podrían alcanzar hasta 38º Celsius (100º Fahrenheit).
En la zona de Grenelle, al oeste de París, los visitantes nadan y toman el sol con una vista única de la Torre Eiffel, con pequeños peces nadando cerca de la superficie.
La calidad del agua se anal