El incendio de Tres Cantos no solo dejó cenizas, también un humo denso y un olor a quemado intenso que se extendió kilómetros del punto afectado. Durante horas, la Comunidad de Madrid respiró a una atmósfera cargada, que obligó a activar alertas y cambió la rutina de miles de personas.

Aunque ya no hay apenas columnas de humo se sigue recomendando cierre de puertas y ventanas a los vecinos de las zonas más próximas al incendio.

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LAS RACHAS DE VIENTO PUEDEN ELEVAR EL PELIGRO

Según ha informado la delegación del Gobierno en Madrid en su cuenta de 'X', en estos momentos no hay riesgo para núcleos de población ni para infraest

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