Tres décadas después, la violencia en Colombia repite la misma tragedia. Y en la misma familia. Era enero de 1991, cuando tras varios meses de secuestro la destacada periodista Diana Turbay, de 40 años e hija del expresidente Julio Cesar Turbay, fue asesinada en un polémico intento de rescate.
Su hijo menor, Miguel Uribe Turbay, estaba cerca de cumplir 5 años.
34 años más tarde Miguel, convertido en un político con título de abogado y maestría en políticas públicas que había conseguido trabajar en la Alcaldía de Bogotá, ser concejal de esa ciudad y, más recientemente, senador de la República, se perfilaba como uno de los candidatos favoritos para las próximas elecciones presidenciales.
Hasta que el pasado 7 de junio fue brutalmente baleado en un evento público de su campaña y en plena