Hay una escapada ideal a pocas horas de la Ciudad de Buenos Aires : se trata de dos lagunas históricas que se convirtieron en una opción perfecta para desconectarse y sumergirse en la naturaleza. Ubicadas en el sur de Santa Fe , reúnen dos joyas del ecoturismo: Laguna Melincué y Laguna La Picasa , ambas reconocidas por su biodiversidad, la abundancia de aves y la posibilidad de disfrutar actividades al aire libre que combinan relajación y aventura.
La Laguna Melincué es el humedal más importante de la región y un sitio clave para el avistaje del flamenco andino. Sus aguas y barros tienen propiedades terapéuticas, lo que le valió el título de Capital del Turismo Termal de Santa Fe. Además de su entorno natural único, conserva un atractivo histórico: las ruinas del antiguo