Emanciparse nunca ha sido tan difícil como ahora . Algo tan básico como acceder a una vivienda se ha convertido en una tarea titánica. Así lo indica el último observatorio publicado por el Consejo de la Juventud de España (CJE), que dice que ocho de cada diez jóvenes no puede volar del nido: el peor dato desde que tienen registros (2006).
Ni salir de casa de sus padres ni acceder a algo que no sea una habitación compartida y la vida reducida a cuatro paredes. Es la realidad que asfixia a una juventud que ve que cada vez es más complicado acceder a un bien esencial como la vivienda. Los precios de los alquileres suben dos veces más rápido que los salarios de los jóvenes (precarios en su mayoría) hasta el punto de que si una persona joven quisiera alquilar un piso promedio tendría