En la ya larga guerra de Ucrania se han visto numerosos ejemplos de cómo la necesidad agudiza el ingenio. En el país invadido han surgido multitud de iniciativas privadas y públicas para desarrollar armas y, sobre todo, drones, en los últimos tres años y medio, siendo una de las más conocidas. En Rusia tienen, por ejemplo, a Project Archangel , un grupo de voluntarios rusos dedicado a la ‘creación de UAV’, pero que ofrece unos resultados algo menos estelares, como demuestra un sorprendente vídeo que ha aparecido en redes sociales rusas y que, aparentemente, forma parte de un intento de integrar un dron interceptor contra sistemas aéreos no tripulados (CUAS) en un caza MiG-29 Fulcrum .
Pero aquí el término 'integrar' hay que interpretarlo de forma un poco elástica. Según se puede v