Para determinar si contaba con los permisos de operación y si el personal que practicaba las cirugías estaba certificado, la Fiscalía alista un cateo en la clínica donde una joven murió mientras le hacían una liposucción.
El establecimiento, ubicado en la colonia Obispado, en Monterrey, permanece bajo custodia de agentes ministeriales y la policía municipal.
“Se está asegurando el inmueble, y se están realizando las diligencias primarias para la integración debida de la carpeta.
“Se pretende hacer un cateo en el que se obtengan datos de prueba que favorezcan al esclarecimiento de los hechos”, dijo el fiscal Javier Flores.
Rinde cirujano su declaración
Una fuente reveló a El Horizonte que el médico responsable del procedimiento estético, y quien se identificó como Sergio, ya rindió su