Ciudad de México, 13 de agosto del 2025.- En la cocina, la fermentación es magia: convierte el mosto en cerveza, la masa en pan y el cacao en chocolate. Pero en algunos casos rarísimos, esa magia se traslada al interior del cuerpo humano , con un efecto desconcertante: embriagarse sin haber probado una gota de alcohol. Es el llamado síndrome de autofermentación o auto-brewery syndrome , un trastorno en el que el intestino produce etanol a partir de carbohidratos y azúcares, provocando síntomas idénticos a una borrachera.
El cuerpo como una cervecería interna
Descrito por primera vez en la década de 1970 , el síndrome ocurre cuando levaduras o bacterias fermentadoras colonizan en exceso el intestino y transforman los carbohidratos de la dieta en alcohol. Entre los mic