FABIÁN HENAO OCAMPO
El papel higiénico, un elemento básico en la mayoría de los hogares desde hace más de un siglo, podría estar acercándose al final de su reinado a medida que la tecnología avanza y la conciencia sobre el medio ambiente crece. La idea de que el papel higiénico se convierta en una reliquia del pasado no es tan descabellada si consideramos la evolución de los hábitos de higiene en otras partes del mundo y el impacto ambiental de su producción masiva.
¿Pero qué podría reemplazar al papel higiénico? La respuesta a esta pregunta podría estar en los bidets, unos dispositivos, que rocían agua para una limpieza más profunda y efectiva, que han sido muy populares en países como Japón, Italia y Corea del Sur durante décadas. La tecnología ha evolucionado, y ahora existen inodor