La Guardia Civil, a través de efectivos del Servicio de Protección de la Naturaleza ( Seprona ), rescató el pasado 12 de agosto a dos ejemplares de garduña que se encontraban atrapados en el interior de una piscina vacía en un paraje del término municipal de Jaén.
La actuación comenzó cuando un ciudadano avisó por teléfono de la presencia, aparentemente, de unos hurones en el fondo de la piscina. Los agentes desplazados comprobaron que se trataba de dos garduñas vivas y de un tercer ejemplar muerto.
Gracias a la colaboración ciudadana y a la rápida intervención de los agentes, los animales, que estaban expuestos a altas temperaturas y corrían riesgo de morir por inanición y deshidratación, fueron rescatados con éxito. Posteriormente, fueron entregados a agentes medioambientales