LOS ÁNGELES (AP) — El gobernador de California, Gavin Newsom, se unió a otros líderes demócratas prominentes el jueves para anunciar que el estado seguirá adelante con un plan partidista para redefinir los mapas congresuales en un esfuerzo por ayudar a su partido a obtener cinco escaños más en la Cámara de Representantes de Estados Unidos en 2026.

La medida es una respuesta directa a un esfuerzo encabezado por los republicanos en Texas, impulsado por el presidente Donald Trump, dado que su partido busca mantener su escasa mayoría en la Cámara de Representantes luego de las elecciones intermedias. Los legisladores de Texas están considerando una nueva reestructuración de distritos electorales que les ayude a enviar cinco republicanos más a Washington, pero los demócratas han detenido hasta ahora una votación al abandonar el estado a fin de evitar que sus colegas republicanos cumplan con las demandas de Trump.

Newsom convocó una elección especial el 4 de noviembre para presentar los nuevos distritos ante los votantes, quienes deben dar su aprobación para que estén vigentes en la próxima elección. Lanzó un anuncio de campaña en las redes sociales al tiempo que los demócratas iniciaban una conferencia de prensa en la que Newsom se unió a una coalición de líderes sindicales y los senadores estadounidenses Adam Schiff y Alex Padilla. Los legisladores estatales deben declarar oficialmente la elección especial, lo cual planean hacer la próxima semana.

La redistribución propuesta por los demócratas aún no ha sido publicada. Se espera que eso ocurra el viernes. Luego, los legisladores planean aprobarla rápidamente la próxima semana. Los demócratas tienen supermayorías en ambas cámaras estatales.

Newsom, quien es considerado como un posible candidato presidencial para 2028, instó a Trump en una carta a principios de esta semana a abandonar su plan, diciéndole al presidente que está "jugando con fuego" y "arriesgando la desestabilización de nuestra democracia".

El mapa de California sólo entrará en vigor si Texas y otros estados avanzan con sus propios esfuerzos de redistribución de distritos, y permanecerán hasta las elecciones de 2030. Después de eso, según los demócratas, devolverán la facultad de reestructuración distrital a una comisión de redistribución independiente aprobada por los votantes hace más de una década.

Hay 435 escaños en la Cámara de Representantes federal y los republicanos actualmente tienen una mayoría de 219-212, con cuatro vacantes. Los nuevos mapas generalmente se redefinen una vez por década después que se realiza el censo. Muchos estados otorgan a los legisladores el poder de redistribuir los distritos, pero algunos, como California, dependen de una comisión independiente que se supone que es no partidista.

El anuncio del jueves representa la primera vez que un estado aparte de Texas se involucra oficialmente en la lucha de redistribución de distritos a mitad de década, iniciando un enfrentamiento nacional que podría continuar extendiéndose a otros estados. Newsom animó a otros estados liderados por demócratas a involucrarse.

“Necesitamos alzar la voz, no sólo California. Otros estados demócratas también deben hacerlo”, resaltó Newsom.

Los demócratas de California enfrentan obstáculos legales y logísticos más complejos que los republicanos en Texas. No está claro cómo responderán los votantes al esfuerzo de mitad de década después que votaron para otorgar el poder de redistribuir los distritos electorales a una comisión independiente en 2010. En Texas, ese poder recae en la Legislatura controlada por los republicanos.

Algunos ya han anunciado que presentarán demandas para bloquear el esfuerzo, y figuras influyentes, incluyendo al exgobernador de California Arnold Schwarzenegger, podrían hacer campaña en contra.

“El último truco de Gavin Newsom no tiene nada que ver con los californianos y todo que ver con consolidar el poder radical demócrata, silenciar a los votantes de California y apuntalar su patético sueño presidencial de 2028”, dijo Christian Martinez, portavoz del Comité Nacional Republicano del Congreso, en un comunicado. “Newsom lo ha dejado claro: destrozará la Constitución de California y pisoteará la democracia, ejecutando un libro de jugadas cínico y egoísta donde los californianos son una ocurrencia tardía y el poder es la única prioridad”.

Los demócratas de California ya tienen 43 de los 52 escaños de la cámara baja del estado, y el estado tiene algunos de los escaños más competitivos de la Cámara de Representantes.

En otros lugares, líderes desde la Florida roja hasta el Nueva York azul están amenazando con reestructurar sus propios distritos electorales, desafiando el proceso estándar de redistribución de distritos que ocurre una vez por década después del censo. Pero ninguno ha avanzado tanto como Texas y, pronto, California, en la nueva redistribución.

Los legisladores de Missouri están a la espera de que el gobernador Mike Kehoe convoque una sesión especial para plantear una reestructuración que favorezca a los republicanos, y un documento obtenido por The Associated Press muestra que el Senado estatal ha recibido una factura de 46.000 dólares para activar seis licencias de software de redistribución de distritos y proporcionar capacitación para hasta 10 miembros del personal.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.