Detrás de la colorida vitrina del salón de té de SaintPierre Macarons en la ciudad de Valencia , estado Carabobo, hay una gestión operativa que asegura el funcionamiento para que todo salga a pedir de boca. Evelyn Hidalgo Sampedro , la pastelera de esta dulce casa, se explaya contando su historia.
Para ella fue un gran golpe descubrir que era intolerante al gluten. Su paladar dulcero fue el que más sufrió con el diagnóstico, hasta que descubrió que podía comer macarons , esos bocados franceses hechos de harina de almendra . Al principio los encargaba, hasta que tomó clases y decidió comenzar a elaborarlos ella misma. Así se volvió una experta en la elaboración de la delicada galleta.
Aupada por la gran aceptación de su entorno que probaba el biscuit , tuvo la iniciativa de co