Los puntos clave
El dolor crónico puede dificultar el sueño, y dormir mal puede agravarlo.
Dormir mal puede reducir el umbral del dolor y aumentar la sensibilidad y los síntomas del dolor.
Toma medidas para controlar el dolor, haz tu dormitorio propicio para dormir y crea una rutina relajante.
Pon atención a pensamientos que aumentan la ansiedad al dormir. Busca pensamientos más neutrales.
El dolor crónico y el sueño tienen una relación bidireccional. El dolor crónico puede empeorar el sueño, y la falta de sueño puede empeorar el dolor crónico. El dolor crónico puede dificultar conciliar el sueño, permanecer dormido y tener un sueño reparador, lo que puede empeorar la calidad del sueño. Además, la falta de sueño puede reducir el umbral del dolor, aumentar la sensibilidad al dolor y