Ante las políticas migratorias del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el estado de Florida ha sido el que más se ha alineado con el mandatario para poder detener y procesar a la mayor cantidad de inmigrantes indocumentados al día.

Semanas atrás, en esta región se abrió el centro de detención custodiado por caimanes, en una zona remota para encerrar a los extranjeros de manera provisional, lo que ayudaría además a mejorar el hacinamiento en las cárceles de inmigración.

Recientemente, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció que su administración está llevando a cabo un proyecto para abrir un segundo centro de detención únicamente para los extranjeros que residen de manera irregular en el país, al que le dio como nombre “Deportation Depot”, que estará ubicado en la Instit

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