Las últimas dos semanas el horror se ha vuelto evidente de nuevo. Particularmente, en el Estado de México hubo dos casos que cimbraron la opinión pública, al grado que la gobernadora Delfina Gómez, en un evento público, se mostró conmovida hasta el llanto.

Primero fue el caso, estremecedor y de alcance nacional por la excepcionalidad de la situación, de Fernandito, por una deuda de mil pesos en el municipio de La Paz. La omisión de apoyo a la mamá cuyo hijo fue asesinado suma a la violencia de los agresores.

Luego supimos del caso de Dulce. Y junto con estos casos, como lo señalamos en mayo pasado en estos #Bastiones, recordamos el asesinato de Dante Emiliano, un niño de 12 años, asesinado al querer proteger un familiar. “No me quiero morir”, dijo Dante Emiliano durante su agonía.

Tambi

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