El beneplácito del Gobierno colombiano fue fundamental para otorgarle la residencia a Carlos Ramón González en Nicaragua; sin embargo, todos los miembros del Gobierno nacional que pudieron haber tenido incidencia han salido a decir que ninguno sabía de esa solicitud.
Desde el presidente Gustavo Petro hasta la canciller Yolanda Villavicencio, pasando por la exministra Laura Sarabia y el exembajador León Fredy Muñoz, negaron haber ayudado a Carlos Ramón a lograr ese propósito. Por eso, los cuestionamientos han caído sobre el embajador encargado de negocios, Óscar Muñoz. Mientras se determina quién dio el respaldo, Petro ya pidió que Nicaragua lo devuelva al país. ¿La dictadura colaborará?