Durante meses, la División de Estafas de la Policía Nacional del Perú siguió de cerca los pasos de un personaje escurridizo. Su nombre, o mejor dicho, sus nombres, se multiplicaban en registros oficiales, en expedientes judiciales y hasta en trámites internacionales. Raffaello Cárpena Llontop , señalado como un experto en fraude, se convirtió en objetivo de una investigación que lo vincula con el uso de identidades falsas, el robo de vehículos y la utilización de matrículas diplomáticas para evitar controles.
Su detención ocurrió en el jirón Cusco, en pleno centro de Lima. El momento fue registrado en video y expuso un intento de resistencia por parte de los asistentes. “¡No hay, señor! ¡No hay una orden!”, se les escucha reclamar en las imágenes difundidas por el programa Punto F