Bolivia se encamina este domingo a unas elecciones generales consideradas las más inciertas y complejas de las últimas dos décadas, en un escenario marcado por la crisis económica, la fragmentación política del partido de izquierda el Movimiento Al Socialismo (MAS), la ausencia de un candidato con clara ventaja en las encuestas y una previsible segunda vuelta, según analistas políticos.
La jornada se anticipa como un punto de inflexión en el rumbo político del país de 11,3 millones de habitantes, donde por primera vez en 20 años ningún bloque llega con hegemonía asegurada.
A la contienda concurren ocho binomios presidenciales tras la renuncia de dos postulantes, en una lista marcada por la exclusión del expresidente Evo Morales por decisión del Tribunal Constitucional, lo cual desató blo