El descubrimiento de huesos humanos en una vivienda de Buenos Aires ha conmocionado a la comunidad local y ha reabierto un caso que permanecía sin resolver desde hace 41 años. Un equipo de antropólogos forenses ha determinado que los restos pertenecen a Diego Fernández Lima, un joven de 16 años que desapareció en 1984.

La noticia ha llevado a la justicia argentina a iniciar una investigación para esclarecer las circunstancias de su desaparición. Este hallazgo ha permitido a la familia de Fernández Lima comenzar un proceso de duelo que había estado suspendido durante más de cuatro décadas.

El caso, que parece sacado de una serie de detectives, ha captado la atención de los medios y de la sociedad, que ahora espera respuestas sobre lo que realmente sucedió con el joven. Las autoridades están trabajando para desentrañar este misterio que ha marcado a varias generaciones en el país.