La cumbre celebrada en Washington entre el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, líderes europeos y el mandatario estadounidense, Donald Trump, ha sido recibida con alivio en Kiev, al disipar temores de que Ucrania fuese presionada para ceder territorios a Rusia a cambio de promesas ambiguas de paz. Sin embargo, persiste el escepticismo sobre la verdadera disposición del Kremlin a negociar mientras continúa su ofensiva militar.
El analista Volodímir Dubovík, profesor de relaciones internacionales en la Universidad Mechnikov de Odesa, señaló que el encuentro logró contrarrestar el impacto negativo de la reunión previa entre Trump y Vladímir Putin en Alaska, donde se percibió que Moscú tomaba la delantera en el llamado “proceso de paz”. “Una posición conjunta europeo-ucraniana es muy im