El nombre de Alfredo Saade volvió a estar en el centro de la discusión pública tras conocerse que la Procuraduría General de la Nación intentó imponerle una suspensión disciplinaria dentro de la investigación por las irregularidades en el contrato de pasaportes . La medida, que buscaba apartarlo de su cargo mientras avanzaban las pesquisas, finalmente no se concretó debido a una serie de maniobras jurídicas que le permitieron al dirigente político esquivar la sanción.
Según se conoció, el Ministerio Público había encontrado méritos para abrir un proceso disciplinario contra Saade, al considerar que su actuación podría estar vinculada a presuntas irregularidades en la adjudicación del contrato, lo que habría derivado en posibles violaciones a los principios de transparencia y legal