BUENOS AIRES (AP) — En un claro desafío a la política fiscal del presidente argentino Javier Milei, la oposición en el Congreso dio el primer paso para tumbar un veto del mandatario a una ley de emergencia en discapacidad que mejora las prestaciones para ese sector vulnerable de la población.

Con 172 votos a favor, 73 en contra y dos abstenciones, la cámara de Diputados rechazó el miércoles el veto presidencial y giró el asunto al Senado, que tendrá la última palabra.

Los opositores, sin embargo, no lograron en la misma jornada reunir los dos tercios de los votos necesarios para insistir en una mejora de los ingresos de jubilados y pensionados que también había sido ventada por el mandatario ultraliberal.

Ambas votaciones evidenciaron la fragilidad de los acuerdos políticos a los que el partido gobernante la Libertad Avanza se ve obligado a pactar con la oposición más moderada en un Congreso que no controla y que se tornan impredecibles en el marco de la campaña para las elecciones legislativas del 26 de octubre.

Previendo el resultado adverso en el tema de discapacidad, el portavoz presidencial Manuel Adorni anunció más temprano en la red social X que el gobierno estaba evaluando otorgar un aumento en las prestaciones para discapacitados con ahorros obtenidos por la baja de pensiones por invalidez mal otorgadas.

La ley aprobada por el Senado el 10 de junio declaró la Emergencia en Discapacidad en todo el territorio nacional hasta el 31 de diciembre de 2027 inclusive.

La ley ordena saldar deudas con los prestadores del sistema de salud y actualizar mensualmente los aranceles del sistema de prestaciones básicas de atención integral para personas que tengan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo.

Por otra parte, establece una pensión no contributiva por discapacidad equivalente al 70% del haber mínimo jubilatorio.

También obliga al Estado a cumplir con el cupo laboral del 4% para personas con discapacidad en el sector público.

El presidente Milei vetó la ley a principios de agosto bajo el argumento de que afectaba el equilibrio fiscal y contradecía el “mandato popular” de “erradicar definitivamente la inflación ”, eje central de su política económica.

La Oficina del Presupuesto del Congreso estimó que la norma implica un gasto extra para el Estado equivalente de entre 0,26% y 0,46% del PIB.

Pese a que Milei cuenta con un respaldo mayoritario de la población para llevar adelante medidas que contengan la inflación, el ajuste a sectores vulnerables como discapacitados y jubilaciones genera más del 60% de rechazo.

“Son derechos, no privilegios. Estamos pidiendo que la gente con discapacidad tenga una vida digna”, expresó la actriz Valentina Bassi, madre de un adolescente con Trastorno del Espectro Autista (TEA) que se encontraba manifestando junto a otras familias frente al Congreso. “La piel de las personas con discapacidad no puede pagar el déficit cero”.

El rechazo al veto se logró con votos del peronismo, izquierda y de bloques más moderados que venían acompañando al oficialismo en otras iniciativas. Todo indica que el veto presidencial quedará sin efecto, dado que el oficialismo tiene una posición más débil en el Senado.

“Nos cuesta conseguir turnos médicos, nos cuesta conseguir una autorización, nos cuesta conseguir todo para ellos”, relató Palola Vergara, mamá de Nayla, una pequeña de 8 años con síndrome Down.

“Milei lamentablemente es una persona sin escrúpulos, que no le importa nadie… Desde que ella nació supe que yo iba a ser su única abogada, la única que peleé por ella, que yo iba a ser su voz. Voy a luchar todos los días de mi vida por ella, para que tenga lo que le corresponda por ley”, afirmó la mujer.

En contraste, la oposición más dura no logró rechazar el veto de Milei a una ley que establecía un aumento extraordinario del 7,2% en jubilaciones y pensiones junto con una ayuda económica de unos 80 dólares para determinados beneficiarios, con el fin de paliar la acuciante situación en la que se encuentran miles de ancianos debido a sus magros ingresos.

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El videoperiodista Víctor Caivano contribuyó con este reporte.