El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, ha sido removido de su cargo tras la decisión de la Federación Regionalista Verde Social (FRVS) de inscribir una lista parlamentaria separada del pacto oficialista. Esta situación ha generado un quiebre significativo en el oficialismo, justo a pocos meses de las elecciones de noviembre.

Valenzuela, quien era el único representante de la FRVS en el gabinete, dejó su puesto en medio de la indignación en La Moneda. La decisión de su partido de competir sin los partidos oficialistas, como el PS, PC, FA, PR, PL y la Democracia Cristiana, fue vista como un desafío a la unidad que el presidente Gabriel Boric había solicitado.

La molestia del Ejecutivo se intensificó debido a que la lista paralela del FRVS incluye a figuras controvertidas, como el exalcalde de Maipú, Christian Vittori, y el diputado Miguel Ángel Calisto, quien enfrenta un proceso judicial. Esta situación ha sido interpretada como una ruptura con la estrategia de unidad del Gobierno.

Fuentes cercanas al Ejecutivo han indicado que la decisión de remover a Valenzuela fue discutida y coordinada con el comité político del Gobierno, y se aceleró tras la inscripción oficial de las candidaturas. El exprecandidato Jaime Mulet, líder del FRVS, justificó la decisión de su partido al señalar que era difícil llegar a un acuerdo entre los nueve partidos involucrados.

Se anticipa que, tras la salida de Valenzuela, otros funcionarios vinculados al FRVS también podrían ser removidos en los próximos días. Este episodio ha abierto interrogantes sobre la cohesión del bloque oficialista y el costo político de las divisiones partidarias en un momento crucial para la agenda del Gobierno.

A la espera de declaraciones formales tanto del Ejecutivo como del FRVS, esta noticia se mantiene en desarrollo.