JD Vance fue abucheado y silbado con gritos de “¡Liberad Washington DC!” durante una sesión fotográfica con tropas de la Guardia Nacional en la estación Union Station de Washington el miércoles por la tarde.
Mientras repartía hamburguesas a las tropas desplegadas la semana pasada por Donald Trump en el Shake Shack de la estación junto al secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el subjefe de gabinete de la Casa Blanca, Stephen Miller, Vance dijo a los soldados: “Apreciamos todo lo que están haciendo” y afirmó: “Hemos devuelto un poco de ley y orden”. Mientras tanto, una multitud de manifestantes protestaba en el exterior.
La multitud gritaba consignas como “¡liberad Washington!” y “de Washington a Palestina, la ocupación es un crimen”. Algunos también gritaron improperios cuando los tres hombres entraron en Union Station y se reunieron en el restaurante, y continuaron mientras intentaban hablar con los periodistas.
Cuando se le preguntó por qué las tropas estaban en la estación en lugar de en otras partes de la ciudad donde las tasas de criminalidad eran estadísticamente más altas, Vance afirmó que estaba invadida por “vagabundos, drogadictos, personas sin hogar y enfermos mentales” y que los visitantes no se sentían seguros. “Esto debería ser un monumento a la grandeza de Estados Unidos”, dijo, y luego añadió: “No tenemos por qué vivir así”.
Refiriéndose a las protestas, Vance dijo: “Es un poco extraño que tengamos a un grupo de personas mayores, en su mayoría blancas, que están ahí fuera protestando contra las políticas que mantienen a la gente segura cuando nunca han sentido peligro en toda su vida”.
Apropiándose de los cánticos de los manifestantes, añadió: “Liberemos Washington para que las familias jóvenes puedan pasear y sentirse seguras y protegidas. Eso es de lo que estamos tratando de liberar a D.C”.
Miller se hizo eco de sus sentimientos y menospreció a los que se habían reunido para protestar calificándolos de “comunistas locos”. “Vamos a ignorar a estos estúpidos hippies blancos que necesitan irse a casa a echarse una siesta porque todos tienen más de 90 años, y vamos a volver a ocuparnos de proteger al pueblo estadounidense y a los ciudadanos de Washington DC”, afirmó.
La semana pasada, el presidente federalizó el Departamento de Policía metropolitana de la ciudad y ordenó a Hegseth que movilizara a las tropas de la Guardia Nacional, alegando que estaba tomando medidas enérgicas contra “el crimen, el derramamiento de sangre, el caos y la miseria” en la capital “sin ley” del país, a pesar de que la tasa de criminalidad ha descendido drásticamente y los delitos violentos se encuentran en su nivel más bajo en 30 años.
Se estima que se están desplegando 1900 soldados en DC. Más de la mitad proceden de estados gobernados por republicanos, como Luisiana y Carolina del Sur. Además de en Union Station, se ha visto a los soldados principalmente en zonas céntricas, como el National Mall y las paradas de metro.