El Partido Popular (PP) ha intensificado sus críticas hacia la directora general de Protección Civil, Virginia Barcones, a quien ha calificado de "pirómana". Esta acusación surge tras los comentarios de Barcones, quien cuestionó las demandas de algunas comunidades autónomas gobernadas por el PP, sugiriendo que estaban pidiendo "cosas imposibles" en medio de la crisis de incendios forestales que ha devastado más de 300.000 hectáreas en el país.
El vicesecretario de Política Autonómica y Municipal del PP, Elías Bendodo, ha manifestado que el Gobierno debe entender que "los incendios no se apagan con ideología ni con crispación, sino con colaboración y lealtad institucional". En una comparecencia ante la sede nacional del PP, Bendodo criticó a Barcones por hacer política en un momento crítico y por insultar a los gobiernos autonómicos.
Barcones, por su parte, ha respondido a las acusaciones, denunciando una "campaña" en su contra y pidiendo que aquellos que no contribuyan a la solución se aparten. "Estoy defendiendo la gestión de un Gobierno. Quien piense que atacándome me va a callar, que pierda toda esperanza", afirmó en rueda de prensa. También hizo un llamado a la mesura y la responsabilidad, señalando que las críticas del PP la acusan de ser "delincuente".
El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha respaldado a Barcones, tildando de "sátrapas" a los miembros del PP y criticando su retórica incendiaria. El PSOE ha exigido a Bendodo que se disculpe por sus comentarios, argumentando que la directora de Protección Civil solo ha expuesto la verdad en un contexto de desinformación.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, también ha intervenido en la controversia, reprochando a Bendodo su lenguaje y defendiendo el trabajo de los profesionales que luchan contra los incendios. Robles ha subrayado que los recursos del Estado han estado disponibles desde el inicio de la crisis y ha instado a reconocer el esfuerzo de quienes están en la primera línea de combate contra el fuego.
El PP ha anunciado su intención de forzar la comparecencia de varios ministros en el Senado para abordar la gestión de los incendios, argumentando que las comunidades autónomas han agotado sus recursos y necesitan más apoyo del Gobierno central. La situación política se complica en medio de una crisis ambiental que ha afectado a miles de ciudadanos.